Es probable que no conozcas nada sobre el whisky Tennessee y que no sepas mucho más de que, tal y como su nombre indica, procede de un estado del Sur de Estados Unidos. Sin embargo, te encuentras ante uno de los whiskies más vendidos del mundo.
El whisky Tennessee es particularmente conocido por ser el más reconocido gracias a la botella universal de Jack Daniel’s, una de las destilerías más populares y por las que merece la pena conocer qué es y cómo se fabrica esta variedad de whisky tan famosa y particular.
Si quieres conocer todos estos detalles y sorprenderte con alguna de sus características, sigue leyendo porque estás a punto de descubrir el verdadero sentido del whisky Tennessee, así como las razones por las que este brebaje sigue siendo reconocido a nivel mundial y, para muchos, se lleva de calle al también famoso bourbon.
¿Qué es?
El Tennessee whisky, o whiskey, como lo llaman en Estados Unidos, es una variedad de whisky que se incluye dentro del catálogo de American whiskeys, condición que garantiza que, como mínimo, un 51% de su composición sea a base de maíz.
Es curioso comprobar cómo uno de los whiskies más famosos y reconocidos del mundo sea precisamente una bebida todavía prohibida en ciudades como Lynchburg, cuna y sede de la destilería de Jack Daniel’s. Sin embargo, y a pesar de los restos de la ley seca que quedan en algunas ciudades de este estado, el consumo y fabricación no están castigados, por lo que sus vecinos se las ingenian para buscar la forma de comprarlo.
Su sabor es mucho más dulce, caramelizado incluso. Sus notas van dejando un rastro mucho más intenso y goloso, tanto para el paladar como para el olfato. Sin embargo, el Tennessee whisky es una variedad que actualmente destilan varias marcas, por lo que cada una de ellas aplica sus particularidades en el resultado final.
Y no, no se fabrica fuera del Estado, ya que las condiciones ideales solo se encuentran en Tennessee, como el agua o la tierra, óptimos para favorecer el destilado del maíz que se emplea en su composición.
¿Cómo se hace el whisky Tennessee?
A diferencia del whisky bourbon y, aunque ambos forman parte de los American whiskeys, el Tennessee posee la particularidad de contar con una serie de procesos adicionales antes de su envejecimiento en barrica que lo convierten en una auténtica maravilla.
Partiendo de la base de que el 51% como mínimo de su composición es de maíz, el whisky Tennessee se elabora siguiendo esta directriz sin perderla de vista, ya que es una condición que viene regulada incluso oficialmente.
Su proceso de fabricación es similar al de cualquier otro tipo de whisky que conozcas, con la particularidad de añadir un pequeño truco final, secreto y técnica que es la que termina por diferenciarlo del bourbon y otros destilados, suavizándolo y aportando ese toque tan especial: filtrado a través de carbón de arce.
Justo después del proceso de destilación del licor, se emplea la denominada técnica del condado de Lincoln en la que se filtra gota a gota a través de carbón de arce, lo que imprime una nota más dulce sobre el whisky, que terminará envejeciendo en barricas de roble nuevas.
Recomendaciones para tomarlo
Disfrutar del buen whisky es una tarea en la que solo tú puedes determinar con qué ingrediente prefieres acompañarlo. En el caso del Tennessee whisky, su toque caramelizado y suavidad respecto al bourbon, hacen que sea óptimo tomarlo en solitario, como mucho, con un poco de hielo.
Aunque hay gustos para todos los colores y sabores, el buen whisky se debe disfrutar de forma individual, con hielo o añadiendo el refresco que más te guste. En el caso de Jack Daniel’s, recomiendan hacerlo con la proporción que indican de Coca Cola.
Si tu paladar es más fino, puedes rebajarlo con un chorrito de agua mineral para reducir su impacto al saborearlo, mientras que también puedes optar por añadir una rodaja de limón que permita maravillarte con la amalgama de contrastes que irás percibiendo.